parasol

Luis y Sandra caminan una vez más, apurados y sudando, por el Jirón de la Unión. No soportan ver al niño quemado pidiendo dinero una vez más. No soportan llegar a la Plaza San Martín con las manos llenas de flyers. No soportan el calor ni la sed. Se sentaron en una banca anónima a cuchichear y a ver las fotos de una desconocida. "¿Una flor para la novia?" por enésima vez. No. No es mi novia. La siguiente foto es bastante complicada. Los cuerpos se confunden.